miércoles, 20 de octubre de 2010

Redes sociales

Windows, gran palabra se le fue a ocurrir al señor Bill Gates cuando creó este sistema. Cada vez con mas frecuencia cuando nos levantamos por la mañana abrimos la ventana digital en lugar de la de nuestra habitación. Miramos el correo electrónico y nuestro preciado Facebook con mas atención que cuando abrimos el armario para ver qué nos pondremos o la nevera para preparar un buen desayuno.
En mi caso, esto es preocupante. No es que esté en contra de las grandes redes sociales y de los ventanales que internet te ofrece ni mucho menos, lo que me quita completamente de quicio es el coste de oportunidad. Me explico,  la cantidad de cosas que dejo de hacer, o que tengo que hacer de forma apresurada por culpa de haber estado demasiado tiempo “enchufada” delante de mi ordenador.  Si retrocedemos en el tiempo, observamos la rapidez con la que internet ha evolucionado y se ha colado en nuestras vidas,  ya no solo como un instrumento de búsqueda de información, sino como gran sustitutivo de las relaciones humanas de toda la vida. Las que nos obligan a salir de casa.  
Las redes sociales que me gustan son las que puedo tocar, me gusta poder conversar con un amigo y a la vez compartir con este un café, poderme reír con él y abrazarle si la situación lo requiere. En Facebook, puedo hablarle, verle, e incluso escucharle, pero por suerte aún no lo puedo abrazar.  Por favor señor Zuckerberg  ( creador  de Facebook) no invente nunca la opción “tocar” en su programa, sería la muerte de las relaciones humanas físicas y verdaderas. Sería el principio de muchas enfermedades tanto físicas, por no mover el cuerpo de una silla, como mentales, por las devastadoras consecuencias de convertirnos en seres “enchufados”.  Matrix dejaría de ser una película de ciencia ficción. Por suerte ahora ya tenemos la aplicación de Facebook para móvil, y por lo tanto podemos salir a la calle y seguir conectados. ¿Por suerte o por desgracia? No hay situación más paranormal que estar tomando un café con alguien, es decir, entablar una relación social de toda la vida y tener a esa persona enganchada a su IPhone o BlackBerry.  Si, ha salido de casa, pero lo único que ha cambiado ha sido el cable por la conexión inalámbrica. ¿Nos estamos volviendo locos?
Mark Zuckerberg, creador de facebook y fan de las chanclas de piscina de toda la vida

Es aquí cuando entra la  buena educación de cada uno. Salvando los casos en que el trabajo nos obliga a estar pendientes de internet, creo que es básico hacer un esfuerzo y dejar de un lado la ventana digital  cuando tienes la posibilidad de estar con alguien en directo. Debemos darnos cuenta que  las relaciones en directo enriquecen mucho más. No tenemos que perder de vista que Facebook no es más que la copia de una conversación de bar multitudinaria. Debemos hacer un esfuerzo y pasar a  cultivar los abrazos, los besos, las caricias, y las miradas.
Ahora sí, voy a hacer uso por enésima vez de Facebook para colgar este artículo, ¡menuda contradicción! Eso sí, acto seguido cerraré mi ordenador y le dedicaré tiempo a la ventana de mi habitación, todo el tiempo que internet le ha robado, pobre.
Súper abrazo en el Big Ben

5 comentarios:

  1. Molt bó nena! Es indignant com pot "enganxar" tant el puto Face.... Aaaaaarrggg... a vegades li tinc ràbia!

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  2. jajaajaj, vale vale, ja veig k no t'he convençut ;)

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  3. "Mark Zuckerberg, creador de facebook y fan de las chanclas de piscina de toda la vida"
    i evidentment, era veritat! que graciós
    i, l'última paraula del text, ha sigut pobre, (pooooooooooobre) això està molt bé.

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  4. jajaajaj, en honor al nostre "poooobre", no tardaré en fer un article amb "etfelicitufill" !

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