jueves, 30 de septiembre de 2010

Bohemios vs boho-chic


“Érase una vez un chico, un chico muy raro y embrujado, dicen que había llegado de muy lejos por tierra y mar. Tímido, triste pero muy sabio” así empieza una de mis películas preferidas, Moulin Rouge, ambientada en el París del siglo XIX, concretamente en el barrio de Montmartre.  Su protagonista, ese chico dulce pero triste, elegante pero descuidado, que transmite fragilidad y misterio a la vez,  es la perfecta descripción de un Bohemio.   
Prácticamente todo el mundo ha tenido algún amigo al cual lo han etiquetado como “ el bohemio” esa persona de aspecto aparentemente descuidado, al que dice no importarle la estética y las apariencias, que siempre va con una moleskin en el bolsillo y un bolígrafo, o perdón, corrijo, y una pluma, que es más decadente.  Después también tenemos las chicas bohemias, o más bien las que eligen el estilo actualmente llamado “boho-chic”, se trata de aparentar ser una sin techo, con el pelo despeinado, pero en realidad obra de Llongueras, y una vestimenta e indumentaria que recuerda a los gitanos del siglo XIX, una especie de Esmeraldas ( el jorobado de Notre Dame) con la diferencia que los trapos que llevan encima no son made in escombros, sino élboré en France 

Mary kate Olsen, celebrity icono del estilo boho chic

Si retrocedemos en el tiempo y buscamos el origen de los bohemios, nos iremos a las grandes capitales europeas a lo largo del siglo XIX, época de romanticismo, donde gitanos emigrados de Bohemia ( actual Republica Checa) divulgan un movimiento socio- cultural que prima las ideas sobre el aspecto, lo complicado sobre lo práctico, y frecuentan barrios nada glamurosos como es el caso del Montmartre de París, el cual tenía escandalizada a la alta société de esta magna ciudad por concentrar el máximo número de prostitutas, alcohólicos, y como no: bohemios.  Ellos eran artistas, muchos escritores, otros músicos que hicieron historia.

Defienda o no a los bohemios, critique o no a las Boho-chic girls, creo que todos hemos sentido alguna vez el deseo de ponernos en la piel de aquél escritor que no tiene ningún tipo de atadura en la sociedad, sino una máquina de escribir y una musa que le inspira, o más bien dos:  Nicole kidman, la rubia de aspecto frágil, y  la encantadora ciudad de París. Porqué como bien dijo el escritor Romántico Henri Murger,  “la bohème no es posible, sino en París”.

cartel de la película "Moulin Rouge"

Cartel de la nueva película " la Boheme" inspirada en la famosa ópera de Giacomo Puccini

2 comentarios: